- Padre Colombo lo vemos cada vez que salimos por Echenique, entre que va y viene, anda entre risas y risas. Todo el mundo lo ve, todo el mundo lo saluda, … hasta tengo la gana de decirle: “padre, una bendición, por favor”. Son padres que te generan confianza, con que tú puedes hablar, conversar, es un pan de Dios.
- Sí, un pan de Dios, que impulsó el aprendizaje del idioma italiano.
- Repito, yo no soy muy apegado a los temas católicos, no soy un fiel asistente a la Iglesia. Soy de los que piensan que uno, si quiere un encuentro con Dios, tiene que mentalmente orarle, rezarle, de repente en un cuarto cerrado, para poder intentar de comunicarse con Él. Pero siempre hay gente que suelen transmitirte valores.
- Así, me comentan que Antonio va a los hospitales, a la Beneficencia (Se nota) Es cierto, yo pensé, al verlo, que de repente hay un familiar … no, no, él visita al hospital, va, recorre, intenta darle calma a un enfermo. Como repito, él camina. Y más, alguna vez le he visto bajar de un colectivo.
- Es un tipo que te genera mucha confianza, y con él, de repente, estaría despuesto incluso hasta confesarme – fíjate tú - Con esto le digo todo.
- ¿Por qué no te confieses conmigo?
- Y también el padre Jorge, es mi buen amigo, lo veo más recto… No… por la cercanía que tengo con él, no puedo confesarme.
- No te conviene, sabe que te va a jalar las orejas.
- Me va a colgar las dos orejas… así…
- Voy con Colombo, que es más tranquilo, seguramente me mandará a rezar unas 100 Avemaría.
- No te va a mandar una penitencia como el padre Jorge.
Christiam y María
